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Ritual Caredamia para la limpieza facial nocturna | Caredamia

Ritual Caredamia para la limpieza facial nocturna

Cuestión de hábitos

Una piel estupenda no se reduce a una cuestión de ADN: tus hábitos diarios tienen un gran impacto en lo que ves y en lo que sientes. Cada producto te dará sus propias instrucciones y recomendaciones, tus amigas te dirán lo que les funciona, los foros de Internet y los grupos de WhatsApp seguirán arrojando una cantidad vertiginosa de opiniones, desde cómo hidratar hasta cómo reparar pieles irritadas. En realidad, cuidar tu piel es bastante personal. ¿Ponemos un poco de orden? Ahí va: el ritual de limpieza facial para la noche que te recomienda Caredamia.

Hay tres cosas fundamentales que buscamos en todo ritual de auto-cuidado: limpiar, tonificar e hidratar. El objetivo es encontrar una rutina que le siente bien a nuestro cutis y también solucionar problemas o enfocarse en las áreas que se desea trabajar. A medida que la piel cambia (por la edad, el clima o nuestros hábitos del día a día), también lo harán sus necesidades y los productos ideales a aplicar. No buscamos la perfección: buscamos lo que mejor nos sienta, fortaleciendo la piel y creando bienestar.

Hay un lema y varios trucos en esto de los rituales de belleza. El lema es que cualquier rutina va a exigir consistencia y paciencia. Los productos que os recomendamos tienen una gran calidad y podrás ver resultados muy rápido pero, para que sean duraderos y tengan impacto a largo plazo, deberás ser perseverante. Para consolidar el resultado, recomendamos utilizar un producto durante al menos seis semanas.

Las rutinas se llaman así porque incorporan varios pasos, donde cada uno tiene su importancia y también su orden. Un truco para recordar cuál va primero es ir del más fino o ligero al más grueso o espeso. Así, el limpiador irá antes que el tónico, que irá antes que el sérum, que irá antes que la hidratante.

Limpieza facial

Empecemos con la limpieza facial, que es el más básico y esencial de los pasos de nuestra rutina facial. La superficie de la piel necesita que se limpie frecuentemente para eliminar el polvo, la suciedad, el sebo y otras secreciones, los contaminantes ambientales, las células muertas y los restos del maquillaje que hayamos aplicado. Aunque aquí estamos ocupándonos de la rutina de la noche, no olvides lavarte al menos dos veces al día, por la mañana y por la noche. Así, evitarás poros obstruidos, piel apagada y acné. Por ejemplo, si no se retira bien la suciedad y los restos de maquillaje de la piel, éstos pueden quedarse acumulados en los poros y obstruirlos. Así, provocan la aparición de puntos negros. Sabrás que estás utilizando un limpiador adecuado porque limpia tu piel sin eliminar los aceites esenciales y saludables.

Para empezar a mejorar tu limpieza de rostro en la rutina de noche, te recomendamos:

  • Si tienes piel grasa o con tendencia al acné, necesitas una fórmula que ayude a romper la suciedad y el exceso de sebo, limpiando bien los poros. A veces esto se consigue mejor con un un líquido espumoso, o con productos que incorporen ingredientes destinados a conseguir este proceso de “descomposición y arrastre”. Te recomendamos probar el Limpiador facial natural Acne Solution de Münnah, que aporta limpieza en profundidad y regula el pH. Tiene una alta concentración en plantas que mantienen limpia la piel y libre de infecciones, principalmente en pien con tendencia a grasa o con acné. Es apto para piel sensible, dermatitis o cuperosis.
  • Si tienes la piel seca, roja o con tendencia a eczemas, te vendrán bien cremas o lociones, productos que estén formulados con emolientes, que tengan mayor concentración de aceites. Por ejemplo, te encajará perfectamente la Crema limpiadora natural ARMONÍA de Terai, que está basada en aceites vegetales, hierbas tradicionales, agua de rosas y flores de Bach; componentes que proporcionan limpieza y calman, refrescan y descongestionan la piel.
  • Si tienes la piel sensible, tienes que acudir al aceite. Sí, sí, al aceite. Y puede que al principio te parezca que ponerte aceite en la cara no es limpiártela, pero lo es. La clave es elegir un limpiador basado en aceite que aborba el sebo de la cara, que sea ligero, que sea hidratante y apto para pieles sensibles. ¿Parece difícil? Lo tienes al alcance de la mano: prueba el Oleogel limpiador facial natural de Lamia. Su textura un poco más cremosa es ideal y su formulación reduce la inflamación y relaja la piel; un gel de color verde esmeralda que tiene el olor característico del tanaceto: fresco, verde, envolvente… Se basa en la eficacia de la limpieza con aceite, en la que no se destruye la protección natural que tiene nuestra piel y sin embargo se consigue una limpieza profunda. Es antiinflamatorio, calmante y relajante, ideal para el momento noche. Lleva aceite de comino negro, que es purificante, equilibrante, antioxidante y reduce rojeces.
  • Para la piel madura, confía, necesitas un bálsamo “que se derrita”. Te explicamos: lo que te conviene es un ungüento muy rico que se transforme en una sustancia más líquida al frotar contra la piel. ¿No te lo imaginas? Espera, que te lo enseñamos: tu comienzo ideal es el Bálsamo limpiador de pomelo y azúcar de Khorali. Al mojar las manos en agua y masajear tu rostro con el bálsamo, este se convierte en una leche limpiadora suave que, además, exfoliará muy ligeramente tu piel. El resultado: una piel limpia, luminosa y sana. Este bálsamo con pH neutro a base de aceites desmaquillará, descongestionará y exfoliará tu piel sin agredirla. Gracias a su aceite esencial de pomelo rico en vitamina C, tiene propiedades desinfectantes, antiinfecciosas y tonificantes. El aceite de almendras, el rey de los aceites desmaquillantes junto con el azúcar, forman el combo perfecto para que este producto se convierta en un imprescindible.
  • Para todas las pieles: un clásico, el agua micelar. Una opción libre de jabón cuyas moléculas atraen el polvo y el aceite como si de un imágn se tratara, sin causar ningún tipo de sequedad. Además, no necesitas aclarar o frotar. Si esta es tu opción, prueba el agua Micelar natural de Münnah. Limpia, tonifica e hidrata. Además, favorece la regeneración natural del colágeno de tu piel y ayuda a eliminar manchas, marcas, imperfecciones y arrugas. Basta con aplicar sobre el rostro con un algodón o toallita para que la piel quede limpia e hidratada.

Tónico

El siguiente paso es el tónico, una palabra que a muchos les recuerda a los astringentes dañinos de los 80. Hubo una época en que se recurría a un producto basado en alcohol que se usaba para secar pieles grasas y retirar restos de suciedad tras la limpieza facial. Las fórmulas actuales no tienen nada que ver, especialmente cuando hablamos de cosmética natural. Pensemos en los tónicos como en suplementos: estos líquidos ligeros aportan un extra de nutrientes, ayudando a que el resto de productos de tu rutina se absorban mejor, al tiempo que ayudan a equilibrar el cutis. Además, te dejarán los poros cerrados, para evitar que se conviertan en la puerta de entrada de bacterias y gérmenes.

El tónico hay que aplicarlo después de la limpieza y antes de poner ninguna otra cosa. Tradicionalmente, se vuelca el tónico sobre una toallita y se frota por la piel del rostro, pero te animamos a poner unas gotitas en la palma de la mano (limpia) y aplicarlo en la piel dando palmadas. 

Te proponemos dos:

  • Tóner facial natural de té verde y jengibre de Khorali: basado en extracto de té verde y de gengibre, tienen un poderos efecto antioxidante y antiinflamatorio, unificando el tono de la piel y frenando la oxidación cutáneo. Además, tiene agua floral de lavanda, que es une excelente regenerador de la epidermis.
  • Tónico natural bifásico BIENESTAR de Terai: está basado en aceites vegetales, hierbas tradicionales, agua de rosas y flores de Bach; componentes que proporcionan tonifican, calman, refrescan y descongestionan la piel.

Sérum

El sérum, para decirlo con sencillez, es un poderoso aliado de la piel. Estos productos están formulados con dosis concentradas de ingredientes activos y se utilizan para mitigar multitud de conidiciones, desde puntos negros hasta arrugas. Incluso si no tienes una batalla concreta que tu piel esté lidiando, todo el mundo debería utilizar un sérum antioxidante para proteger la piel de las pequeñas agresiones del día a día (rayos ultravioleta, contaminación, tabaco y muchos otros químicos). Como esto va de ingredientes concentrados, te damos algunas pistas para que sepas en qué fijarte.  

  • El ácido hialurónico es un ingrediente estrella que sella la hidratación y fortalece la función barrera (en la capa más alta de la piel) para prevenir la pérdida de hidratación. Lo encontrarás en el Sérum facial natural efecto lifting de Savages, que tiene efecto despigmentante, ayuda a la prevención y tratamiento de las manchas a largo plazo gracias a activos como el extracto de Margarita, el agua celular de mandarina y el ácido fítico. El biopolímero de acacia hace un efecto lifting al cabo de 5 minutos de su aplicación, viéndose una piel más rejuvenecida al instante. Esta potente fórmula, con una alta concentración del ya mencionado ácido hialurónico y centella asiática, hace de este elixir el producto perfecto para mantener una buena hidratación y combatir las arrugas y la flacidez.
  • La vitamina C es conocidísima en cosmética, ayuda a dar luz a la piel apagada y reduce los puntos negros. Y es precisamente vitamina C ultra estable lo que tiene el Sérum natural confort de arándanos y gigartina de Khorali, que también incorpora alga gigartina (con todo su banquete de minerales, vitaminas y nutrientes), arándano (que calmará tu piel ay aumentará las defensas ambientales), extracto de acmella oloracea (capaz de reafirmar la piel) e incluso regaliz, que produce un progresivo aclaramiento de las manchas.
  • El retinol estimula la producción de colágeno, por lo que es un súper aliado para luchar contra los signos de la edad. Es uno de los ingredientes que forma parte del Sérum facial natural hidratante antiedad BRÉTEMA de Herbolario Bio gracias al aceite de zanahoria. También utiliza la vitamina C, obtenida en este caso del extracto de guisante. Además, recurre a la camomila y el aceite de girasol para conseguir una fórmula potente: hidratar, proteger y reparar la piel, así como descongestionarla y suavizarla.
  • Los aceites esenciales de los cítricos, junto con otros aceites esenciales como los de salvia y apio, iluminan, desintoxican la piel y eliminan las manchas y marcas de forma progresiva. Lo conseguirás con el Sérum antimanchas nocturno Luz de Münnah, principalmente indicado como tratamiento nocturno intensivo, que tiene un efecto regenerador de la piel. Solo se ha de aplicar cuando no se tenga exposición al sol (principalmente por la noche) y no es aconsejable para pieles sensibles. Si quieres unificar el tono, reducir manchas, marcas o cicatrices, arrugas y otras irregularidades de la piel, este es tu sérum nocturno.

Crema hidratante

A continuación, debes aplicar la crema hidratante, que debe cumplir dos funciones: hidratar (mmm… obvio!) y suavizar la piel. En esencia, se trata de prevenir la pérdida de agua a través de las capas más altas de la piel. También puede complementar los aceites protectores que se encuentran de forma natural en la piel, así como otros pilares de la piel, tales como las ceramidas (familia de lípidos). Este es un producto que genera una acuerdo universal: todos los profesionales recomiendan utilizarla, sea cual sea tu tipo de piel, durante todo el año. Esto es así porque la piel pierde de forma natural la habilidad de retener la humedad a medida que cumplimos años. Todo el mundo necesita, por lo tanto, una crema hidratante, pero según el tipo de piel podemos recomendar un tipo u otro.

  • Si tienes la piel grasa, lo que necesita es una opción muy ligera, que se absorba rápido y tenga una fuerte base acuosa. Por ejemplo, te invitamos a probar la Crema natural hidratante de uva de Nina Priorat. Es un perfecto aliado contra el envejecimiento de la piel que les encantará a las pieles con tendencia más grasa. Gracias al extracto de uva, es muy rica en polifenoles, los antioxidantes más potentes del mundo vegetal.
  • Si tienes la piel normal o mixta puedes optar por una hidratante clásica, más hidratante que un gel pero que se absorba bien. Acepta esta sugerencia: ponte la Crema Facial Hidratante Natural FERVENZA de Herbolario Bio, una potente fórmula de cosmética natural perfectamente equilibrada. De textura ligera y rápida absorción, es capaz de calmar la sed de tu piel, nutrirla y tonificarla en un solo gesto. Sus ingredientes estrella son el extracto de pepino fresco (repleto de vitaminas C y B y minerales) los aceites esenciales, vitamina F, extractos de plantas y ceras florales, que le confieren el poder de calmar la piel, hidratarla en profundidad y combatir manchas e hiperpigmentación.
  • Si tienes la piel seca lo que mejor le va a sentar son productos basados en aceites y con fórmulas más enriquecidas. Sabemos lo que te va a encantar: el Bálsamo Natural Facial Reparador de Lamia. En realidad es un producto multiusos (puede ser hidratante, mascarilla o bálsamo), pero si lo incorporas en tu rutina nocturna como hidratante diario, notarás su protección y efecto anti-deshidratación, manteniendo la piel en calma, suave e hidratada. Este bálsamo de textura fundente y color coral, está formulado para pieles estresadas, secas, deshidratadas y apagadas. Huele a fresco, a campo, y la sensación sobre la piel es de un suave y cálido mando calmante y protector.
  • Si sufres de piel hinchada y sensible (sin tendencia al acné), notarás ALIVIO inmediato con la Crema natural facial para piel irritada del mismo nombre de Terai. Es una crema hidratante de textura media-untuosa, de fácil extensión y absorción, perfecta para cuidar de forma saludable la piel irritada o con necesidad de cuidado intenso. Está basada en aceites vegetales y esenciales, hierbas y flores tradicionales, y flores de Bach; componentes que proporcionan frescor, calma, hidratación, nutrición, vitalidad y protección de los ataques del paso del tiempo.

Contorno de ojos

¿Y qué pasa con la piel, más delicada, que hay en el contorno de los ojos? ¿Es necesario incorporar un producto específico para esa zona? Bueno, la primera pregunta es averiguar si la piel del contorno de ojos te está pidiendo algo a gritos; muchas veces esa zona tiene problemas concretos, como hiperpigmentación, sequedad o hinchazón. En ese caso, sin duda le vendrá bien incorporar este paso a tu rutina. Además, se trata de una piel muy fina y sensible, y es más probable que reaccione a ingredientes irritantes o fuertes. Por eso, los “contornos de ojos” como producto suelen tener en cuenta esa potencial sensibilidad extra y tiene concentraciones más tolerables de los ingredientes activos.

Para las clásicas ojeras y la inflamación busca ingredientes con un efecto calmante. Las ojeras pueden deberse a venas visibles o a un proceso de decoloración común en los tonos de piel más oscuros. Para esas circunstancias pueden ser útiles los ingredientes luminosos como la vitamina C. Un truco de amiga: mejor evitar los retinoles fuertes, que pueden picar y causar rojez, y de las fragancias artificiales, que pueden causar irritación ocular.

No termines este artículo sin echar un vistazo al Contorno de ojos natural Bye Bye Panda’s Eyes de Mon Aroma, la crema de contorno de ojos que te dará una mirada más limpia y libre de bolsas y ojeras. Gracias a la combinación poderosa de sus componentes, sobre todo del extracto de pepino y el agua de hammamelis podrás descongestionar tu mirada al instante. Gracias a las propiedades del agua de rosa Búlgara, el extracto de malva, los aceites vegetales de frambuesa y albaricoque y los aceites esenciales de palo de rosaincienso y palmarosa, conseguirás un efecto regenerante, suavizante y antiarrugas para esta zona tan delicada. Aplícala con unos ligeros toquecitos alrededor de tus ojos para que el efecto sea aún mayor.

Rutina: facial, nocturna y natural

La pregunta del millón es: ¿es la rutina de limpieza facial nocturna igual a la diurna? Muchos productos se recomienda usar dos veces, por la mañana y por la noche, por lo que algunos de los pasos que incorporas en esta rutina pueden servir también para tu cuidado matinal. Algunos productos pueden ser de uso específico para la noche, porque tengan ingredientes que no aconsejan exposición al sol o porque por su textura y untuosidad puedan ser más agradecidos por la noche. Además, el distinguir entre la rutina de la mañana y la de la noche puede servir para “atacar” dos problemas distintos, aportando en cada momento un producto específico y combinar su efecto.

 Si hemos hecho bien nuestro trabajo, ahora tienes las claves para tu rutina de limpieza facial nocturna. Además de las claves, seguro que también tienes nuevas ideas y muchas ganas de probar productos de cosmética natural. Ya, si eso, otro día, te damos ideas para productos que sienta bien aplicar una vez a la semana ;-).

Ve incorporando los productos poco a poco, disfrutando del proceso, creando un ritual de belleza y salud que te traiga unos minutos de paz y tranquilidad. Estos productos cosméticos sientan bien, huelen bien y contribuyen a tu bienestar a corto y largo plazo. Además, son productos de autor, cosmética natural y consciente, que busca mejorar el impacto de la cosmética en nuestra piel y en el mundo en que vivimos. Cuando incorpores nuevos productos, acuérdate de revisar los ingredientes (para saber lo que te pones) y la filosofía de la marca (para saber qué cambio estás haciendo en el mundo). Lee aquí si quieres conocer mejor las ocho maneras que tenemos de enamorarte.

Y lo que sigue a una rutina Caredamia debería ser una noche de felices sueños.

Si tienes dudas cerca de cualquiera de nuestros productos, contáctanos, estamos aquí para ayudarte. ¡Nuestro equipo experto te asesorará!

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